domingo, junio 11, 2006

Separado hasta del perro

Se puede leer en muchos sitios, por ejemplo en

http://noticias.ya.com/insolito/03/06/2006/divorcio-perro-hombre.html

lo siguiente:

“Un tribunal de Barcelona niega a un hombre el derecho a visitar al can de su ex mujer, pese a que había pactado con ella el régimen para acudir a su domicilio y sacarlo de paseo […] Dicho acuerdo, que los esposos incluyeron en el convenio regulador de su separación matrimonial, otorgaba a la mujer la propiedad del perro, aunque reconocía el derecho de su ex marido a sacarlo a pasear siempre que quisiera, con la única condición de que lo acordara previamente con ella.”

No hagáis cachondeo de esto, que aunque no lo parezca estamos en terreno pantanoso.

De buenas a primeras se puede considerar que es bonito, porque por fin se les da a los perros los derechos que tanto tiempo llevan reclamando los defensores de los animales. Pero fijaos que el susodicho pacto que se comenta en la noticia es equiparable a los regimenes que se aplican a los hijos.

Ahora resulta que la mascota tiene el mismo status (o mas) que el resto de partes humanas (al menos las menores de edad) de la familia. Al pobre chucho se le trata como moneda de cambio o como arma psicológica de ataque a la moral (para tocar los cojones, vamos) como se usa a los hijos, o peor, como si fuera la tele de plasma o el todoterreno pickup.

¿Os imagináis? “Tu te quedas al niño y yo al perro” Peligroso, peligroso.